Paso 1
Mito 1: Después de una emoción fuerte, enojo o angustia no debes amamantarlo porque la leche podría hacerle daño.
Falso: Probablemente notará tu estado de ánimo y eso lo altere, además el estrés o el miedo pueden provocar una disminución temporal en el flujo, pero pronto volverá a la normalidad. La leche no puede causarle ninguna enfermedad o caerle mal, así que puedes alimentarlo, pero antes de hacerlo, tómate algunos minutos para relajarte y estar lo más tranquila posible.