Palmeras fáciles de cuidar

PALMERAS DE EXTERIOR

Palma de piña:
Gracias a su singular aspectos, estas palmeras son conocidas como palmeras canarias e incluso son las palmeras que más se cultivan en jardines, hoteles y en los patios de grandes hoteles. Esta palmera tiene un crecimiento lento, pero una vez que alcanza una altura de hasta 20 metros, es tolerante a la sal por lo que sin ningún problema puede ser plantada cerca de la playa.


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Palmera alejandro:
Esta palmera es de tamaño mediano perfecto para el jardín porque tiene un tronco delgado que inclusive puede ser plantado en contenedores grandes. Se desarrolla mejor en un ambiente cálido, fertilizando una vez en primavera, verano y otoño para que sus hojas se mantengan verdes y fuertes.


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Palmera datilera:
Las palmeras fáciles de cuidar suelen ser aquellas que se parecen demasiado, y es que para ser honestos, casi todos los tipos de palmera son nobles y una vez que florecen pueden mantenerse con facilidad. La palmera datilera es distinta al resto gracias a que su tronco no es liso cómo el de las demás y tiene un aspecto muy áspero; su proceso de desarrollo es lento y necesita un suelo húmedo y mucha iluminación.


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Palmera cola de zorra:
Una vez que veas esta palmera podrás entender el porqué de su peculiar nombre. Es una planta con bastante follaje a diferencia del resto, sus hojas tienen a doblarse y así tiene un aspecto similar al de la cola de un zorro. Necesita regarse 2 o 3 veces por semana y estar directamente al sol.


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PALMERAS DE INTERIOR
Abanico china:
Esta es una de las palmeras más fáciles de cuidar y principalmente es de interior. Sus hojas simulan los picos de una estrella y su crecimiento es lento y de preferencia debe mantenerse en una maceta grande hasta que se las grandes raíces se adapten. Necesita luz indirecta, aunque tolera algo de sombra, el suelo tiene que estar ligeramente húmedo pero de preferencia con piedras lisas para que no se ahogue.


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Palmera areca:
Mejor conocida como planta de bambú sólo necesita poca luz y una cantidad moderada de agua; se recomienda ponerla en suelo fértil y cada vez aplicar un fertilizante para dar un mejor aspecto. Sin duda, esta es una de las palmeras fáciles de cuidar que puedes tener en espacios como recibidores, salas o estudios.


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Palmera de salón:
La palmera de salón y la palmera areca son casi idénticas, entre las variantes que puedes notar distintos tonos de verde y en lo frondoso de las ramas. Esta peculiar palmera sólo necesita una limpieza ocasional para eliminar las ramas muertas, considera que puede atraer ácaros o arañas si sus condiciones son muy secas.


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Palmera de sagú:
Esa palmera es ideal para la decoración de interior y más porque tiene un tronco bastante peculiar que no parece arbuso como las otras palmeras. Además, el tronco que tiene esta palmera de interior es un poco más peludo y las hojas son rígidas e incluso suelen simular una piña. Entre sus cuidados sólo necesitará que los rayos de sol peguen de forma directo al menos algunas horas al día y procura regar sólo cuando notes que el suelo está totalmente seco.


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