Cómo hacer sustrato para que las suculentas no se ahoguen

Tener suculentas en casa puede ser súper fácil si sabes cómo cuidarlas, sin embargo, cualquier descuido las puede ahogar. Por eso, te enseñamos cómo hacer un sustrato para que las suculentas no se ahoguen y crezcan con facilidad, gracias a los nutrientes que estarás colocando en la base donde están sembradas. Con este sustrato casero para plantas, estarás aprendiendo un poco más cómo cuidar suculentas para que no se mueran y en caso de excederte en agua, cómo cambiar esa tierra y salvar tu planta.
Paso a Paso
1
Materiales:
Cantidad suficiente de arena de construcción
Cantidad suficiente de tierra
Cantidad suficiente de vermiculita
Cubeta
2
En una cubeta con agua, lava la arena hasta que salga lo más pura posible, es decir, que el agua quede clarita. Este proceso es clave para que la preparación del sustrato para suculentas no tenga demasiadas sales que puedan afectar las raíces de tu planta. Además, la arena ayuda a que la preparación no retenga demasiada agua.

Después mezcla con la tierra preparada, que la puedes hacer muy fácil aunque tarda un año: llena una bolsa de plástico con hojas mojadas y trituradas, cierra la bolsa y haz algunos agujeros para que tenga ventilación y deja reservada en la sombra por al menos 12 meses, en lo que se descomponen las hojas.
3
A la mezcla añade la vermiculita, que será lo que ayude a que el sustrato de las suculentas retenga los nutrientes. Revuelve todos los ingredientes y estará lista para usarla en tus suculentas.
4
Recuerda que las suculentas necesitan cierto tipo de suelo, por lo tanto es ideal que sea una mezcla preparada con elementos clave, ya que así las suculentas no correrán riesgo de ahogarse si es que las tienes en el exterior.
5
En caso de que quieras darle un extra de nutrientes a tus suculentas, te recomendamos agregar un poco de humus de lombriz, que mejora la textura del suelo, retiene agua y mejora la actividad microbiana del sustrato.

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